La Asociación Bancaria, liderada por Sergio Palazzo, expresó su satisfacción a través de un comunicado difundido este miércoles, titulado «Gracias gobernadores», por la posición adoptada por los mandatarios provinciales después de la reunión con el presidente Milei.
La Asociación Bancaria (AB), bajo la dirección de Sergio Palazzo, expresó su agradecimiento a la Liga de Gobernadores Peronistas por su posición firme en contra de la revisión del Impuesto a las Ganancias. La AB elogió la decisión de los gobernadores y solicitó al gobierno nacional que busque «otras herramientas de compensación económica para las provincias sin afectar el derecho de los trabajadores».
En un comunicado titulado «Gracias gobernadores», la AB compartió la postura de los ocho gobernadores peronistas, quienes, después de una reunión con el presidente de la Nación, expresaron la necesidad de encontrar «herramientas de compensación» para las provincias en medio de la fuerte devaluación del peso y la «pérdida de recursos coparticipables». Sin embargo, consideraron que la reversión del impuesto a las ganancias no sería el camino adecuado, abogando en cambio por la coparticipación del 70% del impuesto al cheque.
En sintonía con esta posición, la AB sostuvo que «la reversión de la ley de ganancias impulsada por el Gobierno nacional no sería el camino adecuado». En lugar de ello, instaron a buscar «otras herramientas de compensación económica para las provincias, sin afectar los derechos de los trabajadores».
El comunicado gremial subrayó que la propuesta de revertir el impuesto a las ganancias recae directamente sobre los trabajadores y trabajadoras, presentándolo como si fuera la única solución para reducir el déficit. Además, recordaron que la actual ley, que se pretende revertir, fue votada por el actual presidente cuando era diputado, y en ese momento la calificó como un «impuesto inmundo».
La AB concluyó destacando su firme posición en defensa de los derechos de los trabajadores y rechazó cualquier intento de retroceder en los avances logrados. Instaron a los líderes a honrar la confianza de quienes votaron por ellos, defendiendo los derechos de la población trabajadora.